La curvatura de la córnea

21 junio 2009

Cristina Verbena en El Pequeño Teatro de los Libros

Cristina Verbena llegó con sus pasos de tierra que a veces parecían de aire, se sentó delante de la mesa que sueña con ser escenario y esperó a los niños entre adivinanzas de cama, sol y luna.
¿Cuándo fue la última vez que estuviste en un bosque? La pregunta de la cuentera sería retórica pero a mí me dejó suspendido en un pensamiento: No supe contar, ni ayudado por los dedos, cuanto tiempo ha pasado desde la última vez que estuve en un bosque. Tras esta reflexión urbanita, no me extrañó que los habitantes de los bosques del siglo XXI hayan cambiado tanto como para que entre sus sombras convivan, además del tradicional lobo feroz, una gallina que corren detrás de una oveja, que a su vez corre detrás de un cerdo.
Bosques con caminos de tierra que atraviesan la espesura y llegan hasta una casa de piedra donde una vieja revieja parecía lo que no era con verrugas en la nariz, ropajes negros y los andares renqueantes de quien ha vivido muchos años. Ella aprovechó el miedo que le tengo a las brujas, me paralizó, se acercó hasta mis orejillas y me contó la historia muda de un dragón que soñaba con el oficio de tobogán.
Bosques que se desparraman sobre un acantilado, o descansan al borde de una playas donde una barquita me invitó a navegar entre las preguntas a las que todo buen detective se tiene que enfrentar ¿Cuándo, cómo, quién y por qué puso sal a la mar?
Bosques habitados por mega súper madres chillonas, de esas que siempre quieren tener la razón, madres con libros en las manos que ellas creen collares, cinturones y acordeones. Libros mutantes que se despliegan, se estiran y encogen, libros juguetones para cubrir la calva de los papas, historias dobladas que terminan en cualquier página y comienzan en cualquier lugar. Libros que no lo parecen pero que si lo son.
Bosques habitados por elefantotes con ritmo de tambaleo, jirafas de cuello largo y elefantitos tambarileros, chispas de trabalenguas cortitos, largos y de postín y entre unos y otros, María Sarmiento que fue a cagar y se la llevo en viento.
Cristina Verbena guarda todos esos bosques y unos cuantos más en una caja de madera que lleva de aquí para allá. El sábado pasado estuvo en El Pequeño Teatro de los Libros con sus andares saltarines de aquí para allá y a la pata coja, con sus ojos de anemia que irradian felicidad y la jacarandosa virtud de una garganta que habla como las liebres, protesta como un hipopótamo y canta con la dulzura oriental de quien disfruta con cada una de las palabras que conforman sus cuentos, que uno no sabe muy bien si nacen verbeneros, africanos o bajo el delantal de su abuela.
Dicen por ahí que si estas atento, se la puede ver debajo de las choperas a la vera de los ríos, a la sombra de los pinos mientras refresca el gaznate con agua de búcaro, o en el centro de un corro formado por niños con orejas de escuchar, ojos de ver y latidos del corazón para imaginar bosques con gallinas, viejas enlutadas por mil historias y un capitán barbudo capaz de salar el mar.

Etiquetas: , ,

6 Comments:

At 23 junio, 2009 11:58, Anonymous laMima said...

Es un lujo la gente así...

 
At 23 junio, 2009 19:42, Anonymous El Pequeño Teatro de los Libros said...

Mil gracias Javier.

 
At 24 junio, 2009 17:12, Blogger Verbena said...

Muchas gracias, Javier, eres un lujo de público.
Fue bonico el sábado. Ya te digo que los cuentos alumbran la vida.
Un abrazo y hasta pronto,
Cris

 
At 27 junio, 2009 10:37, Blogger Javier López Clemente said...

Hola LaMima

Seres que fabrican mundos nuevos para que disfrutemos de esa imagianci´´on en desusso, oxidada.

Salu2 C´´orneos.

 
At 27 junio, 2009 10:37, Blogger Javier López Clemente said...

Hola El Pequeño...

Mil de nadas jajajajaja

Salu2 C´´orneos

 
At 27 junio, 2009 10:39, Blogger Javier López Clemente said...

Hola Verbena.

En esta bit´´acora nos levantamso cuando entran los artistas, as´´i que de pie y destocado te digo: Eres una peazo de narradora, ya me gustar´´ia que fueses mi abuela con casa en el pueblo, delantal y puchero.

;-)

Salu2 C´´orneos.

 

Publicar un comentario

<< Home